Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Macabeos 10, 25-28

25 Ante su avance, los hombres de Macabeo, en rogativas a Dios,
cubrieron de polvo su cabeza y ciñeron de sayal la cintura;

26 y, postrándose delante del Altar, a su pie, pedían a Dios que,
mostrándose propicio con ellos, se hiciera enemigo de sus enemigos y
adversario de sus adversarios, como declara la Ley.

27 Al acabar la plegaria, tomaron las armas y avanzaron un buen
trecho fuera de la ciudad; cuando estaban cerca de sus enemigos, se
detuvieron.

28 A poco de difundirse la claridad del sol naciente, ambos bandos se
lanzaron al combate; los unos tenían como garantía del éxito y de la
victoria, además de su valor, el recurso al Señor; los otros combatían con la
furia como guía de sus luchas.